DTM praktikan, espainieraz (in progress, prozesuan) (3)

Hasierarako, ikus DTM praktikan, espainieraz (in progress, prozesuan) (2)

Segida: La puesta en práctica de la Teoría Monetaria Moderna (III)

(…) hemos visto cómo los déficits públicos toman la forma de aumento de saldos netos de las reservas en el banco central y para las cuentas de ahorro de aquellos que reciben el gasto público neto. Ello conlleva un exceso de reservas que es retirado mediante la oferta de bonos del gobierno vendidos bien por el Banco Central o por el Tesoro. Como consecuencia, los déficits públicos suelen dar como resultado una adquisición neta positiva de títulos de deuda del Tesoro, es decir, el gasto público vía déficit crea ahorros en el sector no público en forma de moneda nacional.

Los déficits públicos, en definitiva, significan necesariamente que el sector público ha aumentado el saldo a través de sus gastos a más cuentas que a las que ha hecho disminuir su saldo a través de impuestos. Nos estamos refiriendo al ahorro neto en la moneda nacional. Por lo tanto, los ahorros públicos en moneda nacional no pueden darse con anterioridad al déficit presupuestario. El gasto público es conceptualmente anterior y se realiza mediante el aumento de saldos de cuentas bancarias. Además, el déficit público resultante, así como los ahorros no públicos de activos financieros netos son en este sentido residuales e iguales.

El ahorro en definitiva es un proceso de dos fases: para un determinado ingreso, cuánto de él será ahorrado; y para un determinado ahorro subsiguiente, en qué forma será mantenido. Bajo esta idea, ¿cómo podemos estar seguros que el déficit presupuestario que genera acumulación de derechos sobre el sector público será coherente con la cartera de preferencias no públicas? La respuesta es que los tipos de interés se ajustan para asegurar que el sector no público esté satisfecho de mantener sus ahorros dentro del conjunto de activos existentes. Los precios de los activos y los tipos de interés se ajustan para asegurar que las preferencias de la cartera de valores no pública estén en consonancia con la cantidad de reservas y depósitos nacidos del gasto público, y si el banco central no quiere que los tipos de interés se alejen del objetivo marcado, intervienen en el mercado abierto.

El ahorro neto del sector no público es una consecuencia del gasto vía déficit del sector público, el cual da lugar a ingresos y ahorros. Estos ahorros no pueden ser anteriores a los déficits, ya que los saldos netos concedidos por el sector público son los que crean los ahorros. En realidad los ahorros no financian los déficits, sino que los déficits crean una cantidad igual de ahorros. El miedo de que el gobierno pueda imprimir dinero si el suministro financiero fuera insuficiente está injustificado. Todo gasto público genera aumentos de saldo en las cuentas bancarias privadas, lo cual se contabiliza como un incremento del suministro del dinero; y serán las preferencias de la cartera de valores del sector no público quien determinará qué cantidad de reservas creadas será transformada en bonos, mientras que el incremento impositivo determinará qué cantidad de las reservas creadas y de los depósitos será destruida.

La deuda pública en manos de extranjeros

Si analizamos por ejemplo la evolución del déficit público y la deuda soberana de España observamos que su financiación requiere de un flujo continuo de ahorros globales. ¿Qué ocurriría si los ahorros foráneos fueran insuficientes?, ¿se vería forzado el gobierno a imprimir dinero para financiar sus déficits?, ¿podría acabar en bancarrota? Bajo soberanía monetaria, los déficits públicos crean una cantidad equivalente de ahorros no públicos, de manera que es imposible que el sector público se enfrente a un suministro insuficiente de ahorros. Pero ahondemos un poco más en esta idea.

Cuando el sector público gasta vía déficit, parte de los derechos sobre el sector público acabarán en manos de personas extranjeras, ya que ellos también pueden acumular deuda denominada en moneda doméstica del gobierno. Además de la posesión de moneda, incluidos el dinero en metálico y las reservas, también pueden poseer bonos del gobierno. Todos estos suelen tomar la forma de entradas electrónicas en los libros del banco central correspondiente al gobierno emisor, al igual que los intereses pagados por los bonos. Las preferencias en la cartera de inversiones de estos extranjeros determinarán si acumularán bonos o reservas. El paso de reservas a bonos se realiza electrónicamente.

La pregunta es ¿qué ocurre si los extranjeros en posesión de deuda del gobierno deciden optar por deuda denominada en otra moneda? Ello suele generar el temor entre los economistas de tener efectos indeseados en los tipos de interés y en los tipos de cambio. Veámoslo si tales temores están fundados.

Empecemos primero por analizar la presión sobre los tipos de interés. Los extranjeros o los residentes domésticos compran bonos del gobierno cuando son más atractivas que las reservas. Si cambian las preferencias y se niegan a reinvertir los bonos que vencen, los bancos tomados en su conjunto tendrán más reservas y menos bonos. Si los extranjeros venden bonos que no vencen, ello solo supone traspasar reservas desde el comprador hasta el vendedor. En ninguno de los dos casos se obliga a nada al banco emisor. No existe ninguna presión sobre él para ofrecer tipos de interés más altos. En definitiva, los mercados no pueden forzar al gobierno, ya que este puede simplemente dejar de vender bonos y dejar que en su lugar los mercados acumulen reservas.

¿Qué ocurre con la presión sobre el tipo de cambio? Sin duda alguna ésta es la cuestión más importante que tiene que ver con aquella situación en la que los extranjeros deciden que no quieren ni acumular reservas, ni bonos denominados en una moneda en concreto. Cuando los propietarios extranjeros deciden vender bonos del gobierno deben de encontrar compradores. Si quieren pasarse a otra moneda tienen que encontrar propietarios de saldos de reservas denominados en otra moneda que estén dispuestos a intercambiar estos saldos por los bonos puestos en venta. Para ello los compradores solo compraran bonos a un tipo de cambio menor. Por esta razón la venta de bonos del gobierno por extranjeros pueden afectar al tipo de cambio. Pero mientras el gobierno esté dispuesto a dejar que su tipo de cambio fluctúe, no necesita entrar en acción para evitar una deprecación.

La conclusión a la que llegamos es que un cambio de preferencias de las carteras de inversiones de los propietarios extranjeros sí que puede conllevar una depreciación de la moneda. Pero, mientras la moneda sea flotante, el gobierno no tiene por qué hacer nada.”

(Segituko du)


Iruzkinak (2)

  • joseba

    Frente al poder, la política fiscal como única herramienta estratégica
    http://vozpopuli.com/blogs/7636-juan-laborda-frente-al-poder-la-politica-fiscal-como-unica-herramienta-estrategica
    La vida está llena de contradicciones. Los mismos “mercados” que se llenan la boca pidiendo reformas estructurales, eufemismo de austeridad expansiva y devaluación salarial, justifican las subidas de precios de los activos de riesgo de este verano porque esperan como agua de mayo una expansión fiscal. Sin embargo, hay algo no cuadra, los activos de riesgo, especialmente la bolsa estadounidense, están sobrevalorados y las dinámicas internas de los mismos están sufriendo un deterioro que anticipa un “crash”. En ese caso, un país como España, sin soberanía monetaria, experimentaría un círculo vicioso. Pero de eso, aquí, los medios de comunicación dominantes ni pío, y cuando ocurra pasará lo de siempre, el economista de turno, por cierto, bien remunerado por el sistema, explicará lo usual, un “meteorito venido de la galaxia Andrómeda no detectado por los satélites ha provocado el caos”. En realidad ellos son el caos.
    De nuevo, nos quieren dar gato por liebre. No se trata de utilizar la política fiscal como única herramienta posible de reactivación actual del ciclo económico, que lo es. Ni siquiera los hombres de negocios y políticos del “establishment” creen en las bondades de la misma. El objetivo es otro, seguir alimentando enésimas burbujas que, por un lado, permita mantener su riqueza, y, por otro, eviten que occidente colapse definitivamente. Y si se debe utilizar ahora tácticamente la política fiscal, se utiliza, punto final. (…) el ejemplo de España, cómo se permitió una expansión fiscal desde mediados de 2013, que ha funcionado, no por criterios económicos, simplemente para mantener el “régimen” actual. Veremos qué pasa en los siguientes trimestres.
    Si se acuerdan, (…) en el blog del 17 de julio Frente a la austeridad, ¡la Teoría Monetaria Moderna!, detallamos la reunión en “secreto” de Ben Bernanke con el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, y el primer ministro Abe. El objetivo de la misma era poner las bases para la próxima parada de la política monetaria, en el caso de que al final nada funcione, como así será: inyectar directamente dinero a las familias y al gobierno. Se empezaban a acercar a la Teoría Monetaria Moderna.
    Ben Bernake, Haruhiko Kuroda y Abe diseñaron para Japón una combinación de relajación monetaria extrema y relajación fiscal. De esas reuniones, se acordó un estímulo fiscal de 10 billones de yenes (casi 100.000 millones de euros), combinado con un nuevo programa de expansión cuantitativa. (…) siguen generando más deuda, siguen beneficiando a bancos zombies, siguen manteniendo la vulnerabilidad de los distintos agentes económicos, y siguen sin asumir quitas de deuda. Asumían que la expansión monetaria, tal como se ha implementado, y como venimos avisando desde 2007, es completamente inefectiva en recesión de balances, es decir, en economías endeudadas hasta niveles que constituyen casos extremos desde un punto de vista estadístico, como en la actualidad. (…) los mercados de riesgo han reaccionando con subidas, que se han ido suavizando en las últimas sesiones. La sobrevaloración de algunos mercados y las dinámicas internas (Ted Spread, VIX, CRBs industriales, rendimiento de estrategias carry trade,…) apuntan a fuertes caídas durante los próximos meses.
    El caso de España
    España es un país muy curioso, que contradice todas las tonterías que se están diciendo, tanto por parte del gobierno como de representantes de organismos multilaterales. Aquí no ha habido ninguna reforma estructural encaminada a aumentar la productividad de los factores. Aquí no ha habido ningún cambio de modelo productivo. ¿Han visto lo que sucedió con la afiliación a la Seguridad Social el 31 de agosto? (…). Frente a lo que se dice, la falta de gobierno no ha afectado negativamente al crecimiento económico. ¿Por qué? Justamente por lo contrario que nos cuentan esos medios de comunicación, tan dóciles ellos con el poder, el poder de verdad. La ausencia de un ajuste fiscal, un turismo viento en popa (espoleado por conflictos geopolíticos que han arruinado a nuestra competencia), la expansión cuantitativa del Banco Central Europeo (…), y la depreciación del tipo de cambio efectivo real ha mantenido la (…) economía en el 0,7%-0,8% inter-trimestral.
    Sin embargo, sin soberanía monetaria, la excesiva deuda total (4,1 billones de euros) y externa (1,15 billón de euros) nos hace tremendamente vulnerables a un aumento de la aversión al riesgo en los mercados financieros o a un cierre del grifo del BCE (ambos, aversión y grifo del BCE, están interconectados). En ese caso España entrará en un círculo vicioso. En el trasfondo de todo, tanto en España como en todo occidente, la salida en falso de la actual crisis sistémica. En su momento se prefirió ganar tiempo y defender los intereses de quienes la generaron, la élite bancaria. Y ahora estos mismos reclaman una expansión fiscal. Sí, es necesaria, pero bajo los principios de la Teoría Monetaria Moderna. Pero como no la van asumir, olvídense, fracasará, porque simplemente será por aproximación táctica no estratégica. No confían en ella, y ya saben por qué, por lo de siempre, riqueza y poder.
    En este escenario, ¿saben con qué medidas “nos obsequiará” el nuevo gobierno? Lo contrario a lo que prometieron, subidas de impuestos al factor trabajo, incrementos posibles en el IVA, nuevos recortes en educación y sanidad pública, y casi seguro que el inicio de ajuste en pensiones. Pero da igual tienen otra vez tres años para machacar a la ciudadanía y uno para engañar. Y la culpa es nuestra.”

  • joseba

    Reiniciando la democracia

    http://vozpopuli.com/blogs/7648-juan-laborda-reiniciando-la-democracia

    “(…)  La democracia está siendo devorada desde dentro, a marchas aceleradas. Lo peor es que había señales de advertencia, muy claras, pero las ignoramos. En la década de los 80 las élites empezaron a fraguar el gran negocio, y de una manera muy sutil iban perfeccionando su capacidad de presionar e influir, guiados por un instinto de clase depredador y el diseño de una conspiración continua contra la ciudadanía, contra la democracia. Ese proceso se ha acelerado tras la crisis sistémica de 2008. Mientras todo iba bien, y había algo que repartir a la plebe, más o menos todo iba cuadrando. Pero cuando ya no hay nada que repartir y además se trata de rescatar y ayudar a los que mandan la cosa cambia. Sale a la luz la gran mentira.
    La “superclase” hace tiempo que decidió que la democracia era una amenaza para su riqueza y poder, y empezó a maquinar como neutralizarla, obviamente sin dar la sensación de que lo estaba haciendo. Hay que sustentar la apariencia externa de democracia, con el fin de mantenernos tranquilos y entretenidos, a la vez que se elimina cualquier sustancia de ella. (…) en la inmensa mayoría de las democracias de nuestro entorno, determinadas fundaciones, grandes corporaciones e individuos profundamente ricos se dedican a financiar, directa o indirectamente, centros de pensamiento que simplemente producen estudios con resultados sesgados a su ideología y sus intereses. Pero ahora ya no hay sutileza que valga, han entrado a saco en los grandes medios de comunicación escritos y hablados, y en la mayoría de ellos, mediante un riego generoso de euros, solo se da voz a aquellos que justifican lo que hay y que incluso hacen que el sistema parezca hasta piadoso. Además si hace falta se les crea puestos ad hoc.
    Lo sustantivo es mantener todo como está con el fin de continuar aplicando de manera sistemática aquellas políticas distópicas empeñadas en reconstituir el sistema existente. El objetivo no es otro que favorecer de manera permanente a la clase dominante. Para eso, y por eso, el interés de la ciudadanía en participar en la vida pública lo han rebautizado como “populismo mal informado”.
    El fracaso del proceso de selección natural
    Desde un punto de vista económico, para ayudar a encubrir este continuo latrocinio, se necesitaba un determinado brillo intelectual atractivo. Así intelectuales públicos y subvencionados fueron reclutados para convertir la globalización, el neoliberalismo y el consenso de Washington en un sistema de creencias teológicas. La ciencia sombría de la economía se convirtió en un milagro de la fe. Wall Street y la City brillaban como la nueva tierra prometida, pero muy pocos percibieron que aquellos ángeles que bailaban alrededor de sus cabezas eran realmente chamanes. La codicia se transformó en una virtud.
    Pero al final la inmensa mayoría de la gente acabó perdiendo. Se ha evaporado más un 30% de la riqueza promedio de las familias. Muchas familias no solo no han salido de la crisis, sino que se adentran más profundamente en ella. Todavía tienen que cargar con una deuda onerosa; sus salarios se ven menguados; y sus pensiones de jubilación futuras, y aún no lo saben, serán anémicas. Todo esto fue cínicamente definido como una mejora en el proceso de selección natural. (…). Esta doctrina de “progreso” nos lleva de nuevo a la selva.
    En teoría política existe suficiente literatura que advierte contra el poder de las facciones privilegiadas para capturar la maquinaria de las democracias. Hay que desconfiar, incluso detestar, el poder privado concentrado, y es necesario erigir salvaguardias para evitar que éstos subviertan el principio moral y político básico de toda democracia, y que debería comenzar así: “Nosotros, el pueblo”. Pero las hienas han acabado devorándonos. Las grandes empresas, esas que no pagan un euro de impuestos, pobrecitas ellas, y sus colaboradores, generosamente regados con dinero por doquier, han contado con el apoyo del establishment político para legitimar una desigualdad creciente en la renta y riqueza, para proteger las redes de privilegios y monopolios de las principales industrias. Una mención especial merecen los medios de comunicación, en su mayoría quebrados, pero generosamente  financiados por la superclase. Algunas editoriales de ciertos medios producen sonrojo.
    (…) una pequeña facción privilegiada guiada por una codicia extrema, y políticamente protegida, nos llevó al borde de una segunda Gran Depresión. Para, a continuación, culpar gobierno, a los más débiles e indefensos, a los menos formados, a los más pobres, y a los inmigrantes de nuestros problemas. Ya saben cómo ha acabado todo, ellos más ricos y poderosos que nunca. Y la ciudadanía perpleja y empobrecida. Pero ahora toca levantarse y actuar. Aquellos que defendían como algo bueno la creciente desigualdad han fracasado, sus teorías, mitos y dioses son falsos. Pero la sociedad debe reconocerlo y “botarles”. Solo de esta manera podemos reiniciar la democracia.”

Utzi erantzuna

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